La educación emocional tiene la importancia de ser un eje vertebrador de la convivencia. Estrechamente vinculada a la salud mental, y a la calidad de vida, la educación emocional emerge como un aspecto imprescindible para afrontar los profundos cambios estructurales y sociales que se producen. Repensar la educación desde estos parámetros -como señala el informe Delors- una utopía necesaria.
Tradicionalmente la escuela se ha centrado en los aspectos cognitivos priorizando los aprendizajes científicos y técnicos, dejando de lado el conocimiento de las personas; no se ha “entretenido” en reflexionar sobre los sentimientos y las emociones. Como contrapunto, las aportaciones científicas actuales destacan la vinculación entre las emociones y el pensamiento como base de toda actividad humana. Por tanto se hace necesario un replanteamiento serio sobre este tema.
El Informe Delors (UNESCO 1998) afirma que la educación emocional es un complemento indispensable en el desarrollo cognitivo y una herramienta fundamental de prevención, ya que muchos problemas tienen su origen en el ámbito emocional.
Este informe fundamenta la educación del siglo XXI en cuatro ejes básicos que denomina los cuatro pilares de la educación: (1) Aprender a conocer y aprender a aprender para aprovechar las posibilidades que ofrece la educación a lo largo de toda la vida, (2) aprender a hacer para capacitar a la persona para afrontar muchas y diversas situaciones, (3) aprender a ser, para obrar con autonomía, juicio y responsabilidad personal, y (4) aprender a convivir, a trabajar en proyectos comunes y a gestionar los conflictos.
En la práctica docente nos lamentamos de la poca motivación de los alumnos y del aumento de los comportamientos disruptivos. Lo atribuimos a la realidad cambiante de la sociedad, a la crisis de valores, a la disgregación del sistema familiar, a la influencia de los medios de comunicación de masas... Para Moreno (1998) muchos de estos problemas serían mayoritariamente consecuencia del escaso conocimiento emocional que poseemos de nosotros mismos y de los que nos rodean, fenómeno al que denomina subdesarrollo afectivo.
Sabemos que gran parte del fracaso escolar de los alumnos no es atribuible a una falta de capacidad intelectual, sino a dificultades asociadas a experiencias emocionalmente negativas que se expresan en comportamientos problemáticos, conflictos interpersonales, etc. Los estudios indican que entre un 10 y un 25 por ciento de los escolares son víctimas o participan en actos de maltrato hacia los compañeros; son conductas abusivas, intimidadoras y humillantes, a menudo hacia los individuos socialmente más débiles (Ortega y Mora-Merchan 1996). Este fenómeno se conoce con el término anglosajón de “bullying”.
Enseñar y aprender a convivir, en definitiva, es trabajar para mejorar la convivencia en los centros. Dicho así puede parecer algo muy gordo, complejo e inabarcable. ¿Cómo arrancar? ¿Por dónde empezar? No nos agobiemos. Hay programas muy estructurados que nos pueden orientar. Sólo se trata de empezar y continuar caminando en esta línea.
Fomentar una afectividad positiva y una actitud moral respetuosa y justa entre compañeros es posible si (1) la convivencia se gestiona de forma democrática, (2) se trabaja en grupos cooperativos y (3) se introduce en el currículum la educación emocional, la educación en valores, la gestión de los conflictos. Los programas globales de convivencia más eficaces actúan de manera simultánea en estos tres ámbitos interrelacionados.
Fragmento extraído de: Collell, J., Escudé, C. (2003). L´educació emocional. Traç, Revista dels mestres de la Garrotxa, any XIX, num. 37, pp. 8-10. (Original en lengua catalana).
miércoles, 2 de noviembre de 2011
martes, 18 de octubre de 2011
"Aula siglo XXI" presentada para Encuentro Educared octubre 2011
Una foto, muchas fotos…
Deseo que el aula del siglo 21 sea un lugar donde se pueda aprender con otros, en y para la diversidad, con respeto, tolerancia y solidaridad.
Un aula con muchos libros para leer, imaginar, compartir.
Un aula donde la tecnología sea una herramienta para ampliar horizontes.
Un aula donde el juego, la música, la pintura, el dibujo ayuden a crecer y crear.
Un aula con docentes que disfruten su trabajo y prioricen el aprendizaje de los alumnos.
Un aula con alumnos activos, que investiguen, descubran, resuelvan, reflexionen, fundamenten…
Un aula que esté presente en cada lugar, sin importar si es zona urbana o rural, si es escuela pública o privada, si se accede por camino de tierra o asfaltado, si hay muchos o pocos alumnos. Un aula donde se disfrute de la infancia y la adolescencia con alegría para proyectar el futuro con esperanza.
Fotos de alumnos y docentes Escuela 755 año 2007/8
Deseo que el aula del siglo 21 sea un lugar donde se pueda aprender con otros, en y para la diversidad, con respeto, tolerancia y solidaridad.
Un aula con muchos libros para leer, imaginar, compartir.
Un aula donde la tecnología sea una herramienta para ampliar horizontes.
Un aula donde el juego, la música, la pintura, el dibujo ayuden a crecer y crear.
Un aula con docentes que disfruten su trabajo y prioricen el aprendizaje de los alumnos.
Un aula con alumnos activos, que investiguen, descubran, resuelvan, reflexionen, fundamenten…
Un aula que esté presente en cada lugar, sin importar si es zona urbana o rural, si es escuela pública o privada, si se accede por camino de tierra o asfaltado, si hay muchos o pocos alumnos. Un aula donde se disfrute de la infancia y la adolescencia con alegría para proyectar el futuro con esperanza.
Fotos de alumnos y docentes Escuela 755 año 2007/8
domingo, 3 de julio de 2011
Hacia una alfabetización digital
Hacia una alfabetización digital
El problema de las estrategias que ven a la tecnología como un apoyo instrumental para la enseñanza, una herramienta o una técnica, es que llevan a un uso acrítico y poco reflexivo de la tecnología. En este proceso, preguntas fundamentales acerca de cómo las tecnologías median y representan el mundo, acerca de cómo crean sentidos sobre el mundo y cómo son producidas, quedan al margen.
Varios años atrás, el semiólogo italiano Umberto Eco escribió que si uno quiere usar la televisión para enseñarle a alguien primero tiene que enseñarle a usar la televisión.
Es decir, la educación sobre los medios es un requisito indispensable para la educación con o a través de los medios. Lo mismo puede decir sobre los medios digitales. Si queremos usar Internet o los videojuegos u otros medios digitales para enseñar, necesitamos equipar a los alumnos para que comprendan y critiquen a estos medios: no podemos considerarlos como medios neutrales de distribución de la información.
Necesitamos una concepción coherente y rigurosa acerca de la alfabetización digital, acerca de aquello que los niños necesitan saber sobre estos medios,. Esto es mucho que una cuestión de habilidades técnicas y funcionales. Los niños necesitan tener una forma de alfabetización crítica que les permita comprender cómo se produce la información, como circula y cómo se consume y como llega a tener sentido.
En la educación en medios, un área de trabajo pujante en algunos países hay algunos conceptos clave como re-presentación, lenguaje, producción y audiencia, que pueden proveer un marco sistemático que puede aplicarse a los medios digitales.
Por ejemplo, en relación a internet, este enfoque plantea preguntas desafiantes sobre la representación, sobre la autoridad, la ideología y el sesgo o parcialidad que se adopte, que suelen subestimarse en los relatos acerca de la tecnología de la información. Requiere un análisis sistemático del lenguaje (la gramática o retórica) de las páginas web como un medio (por ejemplo, los enlaces que proponen, el diseño visual, el modo de interpelación, la arquitectura de la información). Incluye un análisis de la producción, de os intereses comerciales e institucionales en juego. Y también mira cómo todo esto impacta en la audiencia o el usuario, cómo se busca captar a los usuarios e invitarlos a participar, y que hacen ellos efectivamente, qué encuentran significativo o placentero.
De la misma manera que la alfabetización clásica tiene que ver con leer y escribir, la alfabetización con medios digitales debiera involucrar tanto la lectura crítica como la producción creativa. El advenimiento de herramientas para la creación digital ha implicado nuevas oportunidades; los estudiantes pueden hacer sitios web o videos digitales de muy alta calidad con herramientas muy accesibles. Sin embargo, la educación en medios no tiene que ver solo con el desarrollo de habilidades técnicas, ni con la idea banal de creatividad. Antes bien, se plantea desarrollar una comprensión crítica de formas culturales y de procesos de comunicación. Una vez más, la tecnología no precipita el cambio en y por sí misma. Necesita una interrogación crítica y su valor depende de manera crucial de los contextos educativos en los cuales es usada.
Párrafo de “Entre docentes, Lecturas para compartir”, páginas 43 y 44 (extraído El Monitor N° 18 Septiembre 2008. David Buckingham
El problema de las estrategias que ven a la tecnología como un apoyo instrumental para la enseñanza, una herramienta o una técnica, es que llevan a un uso acrítico y poco reflexivo de la tecnología. En este proceso, preguntas fundamentales acerca de cómo las tecnologías median y representan el mundo, acerca de cómo crean sentidos sobre el mundo y cómo son producidas, quedan al margen.
Varios años atrás, el semiólogo italiano Umberto Eco escribió que si uno quiere usar la televisión para enseñarle a alguien primero tiene que enseñarle a usar la televisión.
Es decir, la educación sobre los medios es un requisito indispensable para la educación con o a través de los medios. Lo mismo puede decir sobre los medios digitales. Si queremos usar Internet o los videojuegos u otros medios digitales para enseñar, necesitamos equipar a los alumnos para que comprendan y critiquen a estos medios: no podemos considerarlos como medios neutrales de distribución de la información.
Necesitamos una concepción coherente y rigurosa acerca de la alfabetización digital, acerca de aquello que los niños necesitan saber sobre estos medios,. Esto es mucho que una cuestión de habilidades técnicas y funcionales. Los niños necesitan tener una forma de alfabetización crítica que les permita comprender cómo se produce la información, como circula y cómo se consume y como llega a tener sentido.
En la educación en medios, un área de trabajo pujante en algunos países hay algunos conceptos clave como re-presentación, lenguaje, producción y audiencia, que pueden proveer un marco sistemático que puede aplicarse a los medios digitales.
Por ejemplo, en relación a internet, este enfoque plantea preguntas desafiantes sobre la representación, sobre la autoridad, la ideología y el sesgo o parcialidad que se adopte, que suelen subestimarse en los relatos acerca de la tecnología de la información. Requiere un análisis sistemático del lenguaje (la gramática o retórica) de las páginas web como un medio (por ejemplo, los enlaces que proponen, el diseño visual, el modo de interpelación, la arquitectura de la información). Incluye un análisis de la producción, de os intereses comerciales e institucionales en juego. Y también mira cómo todo esto impacta en la audiencia o el usuario, cómo se busca captar a los usuarios e invitarlos a participar, y que hacen ellos efectivamente, qué encuentran significativo o placentero.
De la misma manera que la alfabetización clásica tiene que ver con leer y escribir, la alfabetización con medios digitales debiera involucrar tanto la lectura crítica como la producción creativa. El advenimiento de herramientas para la creación digital ha implicado nuevas oportunidades; los estudiantes pueden hacer sitios web o videos digitales de muy alta calidad con herramientas muy accesibles. Sin embargo, la educación en medios no tiene que ver solo con el desarrollo de habilidades técnicas, ni con la idea banal de creatividad. Antes bien, se plantea desarrollar una comprensión crítica de formas culturales y de procesos de comunicación. Una vez más, la tecnología no precipita el cambio en y por sí misma. Necesita una interrogación crítica y su valor depende de manera crucial de los contextos educativos en los cuales es usada.
Párrafo de “Entre docentes, Lecturas para compartir”, páginas 43 y 44 (extraído El Monitor N° 18 Septiembre 2008. David Buckingham
domingo, 15 de mayo de 2011
Perfil docente en el aprendizaje activo
El docente en el aprendizaje activo es quien asume el rol de mediador en los procesos de enseñanza aprendizaje, y no solo instructor de contenidos conceptuales, debe poseer un perfil de orientador de procesos de formación integral del alumnado. Debe ser mediador atendiendo al concepto de diversidad y orientador: el eje vertebrador de la acción educativa es el individuo y no los contenidos.
De acuerdo al consenso entre los expertos respecto al perfil profesional de los docentes, en la sociedad de las próximas décadas, dichos profesionales deberán poseer:
Actitud democrática, convicción de libertad, responsabilidad, respeto por todas las personas y grupos humanos.
Principios éticos sólidos expresados en una auténtica vivencia de valores.
Sólida formación pedagógica y académica.
Autonomía personal y profesional.
Amplia formación cultural con una real comprensión de su tiempo y de su medio que le permita enfrentar con acierto y seguridad los diversos desafíos culturales.
Capacidad de innovación y creatividad.
De acuerdo al consenso entre los expertos respecto al perfil profesional de los docentes, en la sociedad de las próximas décadas, dichos profesionales deberán poseer:
Actitud democrática, convicción de libertad, responsabilidad, respeto por todas las personas y grupos humanos.
Principios éticos sólidos expresados en una auténtica vivencia de valores.
Sólida formación pedagógica y académica.
Autonomía personal y profesional.
Amplia formación cultural con una real comprensión de su tiempo y de su medio que le permita enfrentar con acierto y seguridad los diversos desafíos culturales.
Capacidad de innovación y creatividad.
domingo, 27 de marzo de 2011

En la provincia de San Juan se realizó el pre congreso de CIENaSuD, el 21 y 22 de marzo.
La Mesa directiva nacional tuvo a su cargo, en apoyo a la comisión provincial de San Juan, el tratamiento de la organización del Congreso que se realizará desde el 12 al 16 de septiembre en la San Juan. Nilda Beatriz Sena estuvo presente en representación de los supervisores de la provincia de Corrientes.
sábado, 12 de marzo de 2011
viernes, 25 de febrero de 2011
Encuentro Educared en Bs As
El 18 de febrero se concretó un encuentro de docentes de AUA, proyecto de Educared. Ha sido muy provechoso por el contacto directo que permitió comentar experiencias y conocer nuevas propuestas de Educared y Fundación Telefónica. Fue muy enriquecedor para la práctica docente y para reafirmar el compromiso con el uso de las TICs en educación con fines de equidad, socialización, formación, atención a la diversidad, entre otras muchas metas que mueven al perfeccionamiento docente en el tema.
¡Gracias por la invitación!
Nilda Sena
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